La sentencia considera probado que se apropió de manera indebida de 42.200 euros
Saqueó las cuentas de la delegación en Córdoba de la Federación Andaluza de Caza y, al menos durante cinco años, empleó parte del dinero de los socios en beneficio propio. El Juzgado de lo Penal número 1 ha condenado a dos años de prisión al exdelegado del colectivo de cazadores cordobeses, con sede en Puente Genil, como autor de un delito continuado de apropiación indebida por quedarse con 42.297 euros para pagar facturas propias y costearse determinados servicios.
El procesado fue delegado de la Federación de Caza desde mediados de la década de los 80 y hasta el mes de septiembre de 2010. La sentencia considera probado que, en el ejercicio de dichas funciones, "guiado por el ánimo de obtener un beneficio ilícito y de forma continuada", al menos desde el año 2005 y hasta que cesó en su cargo en septiembre de 2010, llevó a efecto "disposiciones dinerarias y realizó pagos para fines y con objetos distintos a los que tenía estatuariamente atribuidos".
Así, en el año 2005, por ejemplo, realizó "salidas injustificadas" de dinero mediante el abono de diversos cheques al portador y nominativos por un importe total de 2.300 euros; un pago "injustificado" de combustible por importe de 2.292 euros e incluso abonó el recibo de un seguro (326 euros) no relacionado con la federación. La actitud se mantuvo así hasta el año 2010, según determina la resolución judicial, que cuantifica en 42.297 euros el perjuicio total causado a la federación.
La sentencia determina que el delito es continuado debido a que el procesado "aprovechó la condición que ostentaba y las facultades de disposición de patrimonio ajeno" durante varios años. Durante la vista oral, el encartado declaró que ejercía de delegado de la Federación de Cazadores "desde por la mañana hasta por la noche", a lo que añadió que durante esa larga época "no se dedicaba profesionalmente a nada" y "no tenía medios de vida", sino que dedicaba "exclusivamente" su esfuerzo a esta labor. En la vista oral, el delegado en Sevilla del colectivo hasta 2014 testificó que se trata de un cargo "meramente honorífico y altruista", por el que no se recibe remuneración alguna.
Un método por el que resultaba imposible fiscalizar los gastos
La sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Córdoba determina que el exdelegado en Córdoba de la Federación de Caza de Andalucía empleaba un mecanismo conforme al cual "resultaba imposible el control o fiscalización del gasto". En este sentido, el magistrado considera "lógico" que si el encartado realizaba viajes para efectuar labores federativas, de haber solicitado el pago a la federación, ésta lo hubiera "consentido". "Ahora bien, en este caso lo determinante no es tanto que la totalidad de las cantidades que el acusado percibió fuesen indebidas, sino que resultaba imposible el control o fiscalización del gasto", determina la resolución. Los diferentes testigos que participaron en la vista oral dibujaron una delegación en la que a duras penas se podía determinar el gasto que realizaba su responsable. Y el juez, en este sentido, concluye que las disposiciones patrimoniales "excedieron, con mucho, de lo que se considera correcto y adecuado". "Como se señala por las acusaciones, la realidad es que no tenía otra dedicación, algo que él reconoce, e hizo un oficio de un cargo que no lo era", concluye el juez. Aparte de la pena de prisión, deberá reintegrar los 42.297 euros indebidamente cobrados.(El Día de Córdoba. Angel Robles)