Tal día como hoy 6 de febrero de 1870, se notificaba a todos los empleados del Ayuntamiento que en atención de haber dispuesto el Sr. Ministro de Hacienda ingresar en el tesoro público las cuotas que por recargos para gastos municipales se recaudaran en las contribuciones territoriales e industrial, el Ayuntamiento ni tiene recursos con que satisfacer sus gastos y por tanto al empleado, que quien quisiera seguir desempeñando su destino ha de de ser con la condición de no reclamar al Municipio su sueldo hasta tanto la corporación se hiciera de recursos con los que solventar sus obligaciones, pudiendo retirarse desde luego los empleados que no esuviesen conformes con la determinación adoptada.
En la fotografia adjunta, de comienzos de 1900, se observa el edificio consistorial anterior al existente.