Otra Feria. A muchos ya nos pilla más desganados. No es como aquellas ferias de… 1960 y 70. Entonces era distinto para los que tenemos plata en el cabello. Entonces se empezaba, según en qué año, con un tinto en la Huerta Ibarra, con un tomate picado, un bañito en el río, un partidillo de fútbol en la orilla, otro tinto, otro tomatito, unas sardinas, un bañito y… por la tarde a subir para arriba y siesta. Por la noche, ya maqueado, como diría un querido fosfonauta, a la feria con los amigos en plena Matallana. ¡Uf! ¡Qué ambientazo! Desde El Romeral al Tropezón era no parar. Tómbola, casetas de tiro, trileros, el vendedor de higos chumbos, el de los camarones…
¿Qué película ponen en el Santa Susana? ¿Y en el Avenida? Vemos las carteleras que tan artísticamente estaban con tiza escritos los títulos de las pelis. ¿Entramos? Hay que pasar primero por aquella taquilla estrecha. Una vez dentro por la cantina a comprar un Naeba y un cartucho de pipas.
Una vez fuera a la caseta de la juventud o a la municipal. Cerveza en mano y a echar un vistazo. No había ni móvil ni GPS ni ginebras con nombres estrafalarios, ni copas de balón ni nada de eso. Había un Águila, una Cruzcampo o una San Miguel fresquitas y un cubatilla de ginebra con Coca Cola. ¡Y punto! Y a buscarte la vida para bailar.
La Matallana se ponía que hervía. Y los cacharritos… ni te cuento. Los columpios, el látigo, el circo con fieras, el Teatro de Manolita Chen… Un no parar. Por la Matallana a echar un vistazo a ver… ¡Allí! ¡Ea, pues ya estamos todos! Paseo para arriba, paseo para abajo, uno que se queda un poquillo más atrás, otro que se despista… Unos a la caseta de la Juventud, otros a la municipal, otros a la del Mercantil y otros que acaban en la del C.D. Pontanés. Aquello fueron amores que duraron una feria y poco más.
Tras La Yenka empezaron las canciones del verano y los Grupos musicales como Los Pekenikes, Los Sonor, El Dúo Dinámico, Los Relámpagos, Los Mustang o Micky y Los Tonys, a los que se sumarían Los Brincos, Los Ángeles, Lone Star, Los Sírex y Los Pasos, y poco más tarde Los Canarios, Los Bravos, Los Mitos y Los Pop-Tops.
Con Luis Aguilé “Juanita Banana”, con Formula V “Cuéntame”, “Un rayo de sol”, “Tengo tu amor” y “Eva María”, con Los Payos sería “María Isabel”, con Gerogie Dann la tira de canciones, con Boney M “Rivers of Babylon” y así muchísimas canciones populares y grupos muy conocidos. Entre finales de los 60 y los 70 había patillas, zapatos de plataformas, nonainos y lereles para todos los gustos.
Luego, días más tarde, cuando aquella chica que vino de Valencia a pasar sus vacaciones se fue o aquel chico que vino de Madrid se fue también… el que vino fue el Dúo Dinámico a recordarnos “El final del verano” con su mítica canción.
¡Aquellas ferias en la Matallana de los 60 y 70…!(José L. Aires Rey)
Pontaneando, una vez más, felicita a D. José Lorenzo Aires por los magníficos relatos evocadores de tiempos pasados en torno a lo que fué la vida en torno a las distintas fiestas de nuestro querido Puente Genil, hoy ya en la lejanía del implacable caminar del reloj de otra época.
