D. Clemente Rivas Jiménez, tras el artículo aparecido recientemente en este BLOG de PONTANEANDO, gentilmente nos remite una amplia y documentanda referencia histórica del Reloj de la Villa ubicado en el campanario del Santuario de la Concepción, sede canónica de la Patrona de nuestro pueblo.
" Según los historiadores Pérez de Siles y Aguilar y Cano en la torre de dicho Santuario estuvo colocado el Reloj de la Villa desde 1.605 a 1.655. En la edificación del nuevo templo, a mediados del s. XVIII, se colocó, en el segundo cuerpo de la torre.
Posteriormente se puso un nuevo Reloj que perteneció a la Inquisición de Córdoba y que fue comprado por este Ayuntamiento al Estado, colocándose el 3 de mayo de 1.821.
Según el Cronista e Historiador Luque Estrada en 1.901 se colocó el actual Reloj llamado “de la Villa” que fue adquirido por el Ayuntamiento en la cantidad de 2.000 pesetas, a la casa J. G. Girod de Madrid.
Dicho artilugio cuenta con una valiosa maquinaria de cuerda con dos pesas. Cada 48 horas un empleado del Ayuntamiento subía a la torre para dar cuerda. Las dos campanas con las que se dan los toques son propiedad de la Iglesia. La maquinaria, como vimos, la costeó de la Alcaldía, no obstante según el alcalde Manuel Baena fue donada, aunque no se precisa a que asociación.
En 1.990 la Hermandad colocó un cuadro de mandos, martillos e instalación eléctrica para los toques en las campanas. Parte de esta instalación aún se sigue aprovechando.
Tras la restauración del templo en 1.999 se decidió instalar un Cuadro de mandos electrónico (ordenador) con control de relojería y toques diarios. Tres años estuvo parado el Reloj hasta que se reunieron los fondos necesarios. Costeando la reparación y nueva instalación el Ayuntamiento en 2000.
En 2.006 hubo que restaurar una de las campanas que fue desmontada y restituida.
Tras el paso del tiempo y por el continuo uso se le han realizado leves reparaciones de sustento. El mantenimiento ha corrido a cargo de la Cofradía de la Patrona, pero es necesaria una profunda restauración a esta pieza de singular valor e historia.
El cuadro de mandos ha quedado anticuado y obsoleto; y en ciertas ocasiones (ejemplo: al superar la temperatura ambiente 30 grados…) deja de funcionar.
El minutero de la esfera no funciona, marcando una hora incorrecta.
Las campanas no poseen yugos, sostenidas por unas barras de hierro oxidadas, por la intemperie, que afean el entorno artístico y amenazan desplome por su deterioro.
Los martillos de toques (los cuartos y la hora en punto), al ser de los primeros que se comercializaron en el mercado, han quedado arcaicos y cada cierto tiempo necesitan nuevas reparaciones, por estar formados de piezas primitivas y que poseen exiguo tiempo de vida. Las actuales maquinarias y tecnologías nos dan mayor garantía y durabilidad.
Tres de las campanas están partidas y mutiladas con lo que producen un toque desafinado. En consecuencia no llevan una escala musical afinada.
No han faltado a lo largo de los años particulares y vecinos preocupados por el patrimonio de Puente Genil, y que se han ocupado de pedir presupuestos a diferentes casas de Campanas y Relojes para la rehabilitación y restauración de esta joya del dominio pontanés.
Esta pieza por su continuo uso y por las leves reformas toscas que continuamente se le practican no acaba de quedar perfecta y duradera. Es conveniente hacer una profunda reforma que garantice una belleza estética necesaria y una utilidad perdurable.
Seguimos investigando su historia a la espera de encontrar ese documento que nos de la fecha y todos los datos concernientes; y sobre todo, a qué asociación pertenece, para continuar insistiendo y reclamando a su propietario la restauración de este valioso Reloj. "
