La hasta ahora concejala de Nuevas Tecnologías y Gobierno Abierto de Puente Genil, Mónica Luque (PSOE), presentó ayer la renuncia ante el Pleno en un ambiente de crispación tras las críticas vertidas la semana pasada por el portavoz del grupo municipal de IU, Manuel Baena, quien instó al equipo de gobierno a aclarar los motivos de la dimisión de la edil. Baena sugirió que la marcha de Luque se debe a que la ya exintegrante del equipo de gobierno no ha podido justificar el dinero de una subvención pública que recibió una empresa familiar, versión que fue rechazada ayer por la concejala, quien insistió en que su marcha se debe exclusivamente a motivos de salud.
En una breve intervención ante la corporación, Luque agradeció la confianza de sus compañeros de partido y destacó los avances importantes llevados a cabo en su área, de reciente creación, para la mejora de la accesibilidad al Ayuntamiento.
No es agradable irse en estos momentos -dijo-, pero "me voy por mí y es momento de hacer un alto en el camino". En respuesta a Baena, dijo que su exempresa no soportaba deudas anteriores y aclaró que ni ella ni su marido han sido citados ni requeridos. "Nuestra trayectoria la hemos creado nosotros mismos y nunca hemos recibido ayudas de ninguna fuerza política", aclaró. No por repetir una mentira se convierte en verdad, dijo en referencia al discurso de Baena. Y advirtió de que si continúa la insistencia en acusaciones sin fundamento llegará el momento de una aclaración en el juzgado, pues no permitirá -avisó- que nadie ensucie su trabajo ni su trayectoria.(El Día de Córdoba. José M. Cabezas)