La Unidad Canina del Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios de Córdoba se ha consolidado, en sus seis años de existencia, como un referente en el rescate de personas en siniestros de carácter nacional e internacional, gracias, entre otras cuestiones, a la utilización del método Arcón.De hecho, en los últimos años, además de intervenir en rescates de catástrofes naturales como Perú (2007), Haití y Chile (2010), se ha reclamado su presencia para participar en eventos y maniobras por toda la geografía española como Huesca, Madrid y Béjar (Salamanca).
Esta unidad especializada, que depende de la Diputación de Córdoba, está compuesta por once bomberos y diez perros adiestrados, de los cuales siete están listos para afrontar cualquier tipo de intervención.
El instructor de la unidad y jefe del Parque de Bomberos de Puente Genil, Antonio García, comenta que tres de los perros están en periodo de formación. “En un mes un perro puede estar preparado para realizar pequeñas búsquedas y en un año lo estará para realizar intervenciones en grandes catástrofes”, añade García.
Para la formación de los ejemplares, la Unidad utiliza el método Arcón, un sistema de búsqueda de personas sepultadas vivas bajo los escombros y tierra desarrollado en Andalucía y reconocido, entre otros, por el Comité Español del Programa el Hombre y la Biosfera de la Unesco.
El instructor destaca que este método es utilizado en Andalucía y en muchos países de Latinoamérica. “El perro tiene una doble función en las intervenciones. La de buscar y descartar si hay personas vivas bajo los escombros”, explica el jefe del Parque de Bomberos de Puente Genil y añade que “a nivel mundial, está reconocido que los perros son la herramienta más eficaz para identificar si hay o no personas vivas bajo tierra”.
Para que un perro sea adiestrado para formar parte de esta unidad especializada es necesario que el animal sea dinámico, le guste jugar y sea sociable, tanto con otros perros como con personas. “Tampoco puede ser un perro muy pesado o con instintos de cacería. La raza no influye en absoluto. El perro más anciano de la unidad tiene nueve años y medio y es un mestizo”, apunta Antonio García.
No obstante, la formación del animal nunca termina, por lo que es necesario que una vez por semana y durante unas seis horas se entrene al perro en distintos escenarios y con condiciones climáticas cambiantes.
Asimismo, los miembros de la Unidad Canina han sido seleccionados entre los componentes de Consorcio después de superar con éxito unas duras pruebas de capacitación psicofísica y de valoración de su formación profesional en primeros auxilios, apuntalamiento y desescombro.
Este servicio colabora con ONG como Bomberos Unidos Sin Fronteras y con otros organismos oficiales como la Unidad Militar de Emergencias, Unidades Cinológicos de la Guardia Civil, o la de Policía Nacional, ya que “tanto nosotros como los perros tenemos oportunidad de aprender en los siniestros, realizando pruebas en los entrenamientos y compartiendo conocimientos y experiencias con otros compañeros”, comenta Antonio García.
En Andalucía solamente se cuenta con este servicio de manera oficial en Cádiz, dependiente de la Diputación, y en Sevilla, que pertenece al Ayuntamiento.(Córdobainformación)
