El proyecto impulsado por Cruz Roja Española en Córdoba, Puente Genil y Lucena para prestar atención sociosanitaria a la población que ejerce la prostitución benefició el pasado año a 139 personas. Según informó ayer esta oenegé, gracias a esta iniciativa 24 mujeres de Puente Genil, 12 mujeres y un hombre en Lucena, y 102 personas en la capital (98 mujeres y 4 hombres) recibieron del voluntariado de Cruz Roja tanto material preventivo e higiénico como la información y el apoyo sociosanitario que requirieron.
La entidad humanitaria pretende con este proyecto "paliar la exclusión y marginación social que sufren quienes ejercen la prostitución". La iniciativa cuenta con la financiación del Ministerio de Sanidad y Política Social y de las consejerías de Igualdad y Bienestar Social y de Salud de la Junta.
El perfil más frecuente entre las beneficiarias de este proyecto es el de una mujer de origen latinoamericano, sobre todo de Brasil, y con edades comprendidas entre los 18 y los 34 años. No obstante, durante 2010 el personal de Cruz Roja atendió a personas de 17 países de todo el mundo. No hay que olvidar que muchas de las prostitutas son inmigrantes que se encuentran en España en situación irregular, circunstancia que complica su acceso a la información sanitaria, social y laboral e incrementa su grado de vulnerabilidad.
Cruz Roja concentra su labor en las personas que ejercen en pisos encubiertos, que va aumentando poco a poco. Así, 16 inmuebles de Córdoba, Puente Genil y Lucena han sido visitados cada 15 días por el voluntariado de Cruz Roja, "unas visitas en las que se suele realizar una atención social integral". No obstante, la entidad humanitaria también ofrece este servicio en sus dependencias en las tres localidades, donde trata de dar respuesta a todas aquellas que lleguen solicitando información social o sanitaria, acompañamiento, apoyo en gestiones administrativas y cualquier tipo de material preventivo.
De igual modo, se presta atención psicológica, a la que en el 2010 recurrieron una quincena de personas, y ofrece la posibilidad de hacerse test para el diagnóstico rápido del VIH, del que el pasado año hicieron uso 32 personas.
Cruz Roja también destacó ayer que buena parte de las mujeres con las que se trabajó dentro de este programa durante el año pasado han sido derivadas a diferentes recursos de búsqueda de empleo, tanto de la propia oenegé como de otras organizaciones. (Diario Córdoba)
La entidad humanitaria pretende con este proyecto "paliar la exclusión y marginación social que sufren quienes ejercen la prostitución". La iniciativa cuenta con la financiación del Ministerio de Sanidad y Política Social y de las consejerías de Igualdad y Bienestar Social y de Salud de la Junta.
El perfil más frecuente entre las beneficiarias de este proyecto es el de una mujer de origen latinoamericano, sobre todo de Brasil, y con edades comprendidas entre los 18 y los 34 años. No obstante, durante 2010 el personal de Cruz Roja atendió a personas de 17 países de todo el mundo. No hay que olvidar que muchas de las prostitutas son inmigrantes que se encuentran en España en situación irregular, circunstancia que complica su acceso a la información sanitaria, social y laboral e incrementa su grado de vulnerabilidad.
Cruz Roja concentra su labor en las personas que ejercen en pisos encubiertos, que va aumentando poco a poco. Así, 16 inmuebles de Córdoba, Puente Genil y Lucena han sido visitados cada 15 días por el voluntariado de Cruz Roja, "unas visitas en las que se suele realizar una atención social integral". No obstante, la entidad humanitaria también ofrece este servicio en sus dependencias en las tres localidades, donde trata de dar respuesta a todas aquellas que lleguen solicitando información social o sanitaria, acompañamiento, apoyo en gestiones administrativas y cualquier tipo de material preventivo.
De igual modo, se presta atención psicológica, a la que en el 2010 recurrieron una quincena de personas, y ofrece la posibilidad de hacerse test para el diagnóstico rápido del VIH, del que el pasado año hicieron uso 32 personas.
Cruz Roja también destacó ayer que buena parte de las mujeres con las que se trabajó dentro de este programa durante el año pasado han sido derivadas a diferentes recursos de búsqueda de empleo, tanto de la propia oenegé como de otras organizaciones. (Diario Córdoba)