-¿Cómo supo usted que había interés por parte de la Guardia Civil en construir un nuevo acuartelamiento? -Lo supe por el director de una entidad bancaria de aquí, de Puente Genil.-La parcela en conflicto, ¿es la única que usted ofertó? -La parcela del polígono de las Flores donde se ha construido el nuevo acuartelamiento es la única que no llegué a ofertar. Sí oferté dos parcelas que adjunté con la documentación que remití a la Zona de la Guardia Civil, y que fueron desestimadas.
-¿Conoce si otros empresarios ofertaron terrenos? -Como se recoge en el sumario, no sólo fui yo quien ofertó terrenos, sino que otro empresario de la localidad con participación en la empresa constructora más grande del municipio también propuso otros. De hecho, el alcalde, Manuel Baena, corrobora lo que cuento, y en el sumario se recoge que él informó a los empresarios locales de la intención de la Guardia Civil en construir un nuevo cuartel. Por tanto, quien no ofertó es porque no le interesó.
-¿Mantiene usted alguna relación especial con el alcalde o los concejales imputados? -Especial, ninguna. Soy un empresario de esta localidad con inquietudes y conozco al alcalde, así como a los concejales, pero no he tenido nunca una relación de amistad con él, para nada. Me ha atendido correctamente cuando le he requerido, pero nada más.
-¿Conocía usted al técnico de la Guardia Civil imputado, el señor Salmerón? -No, y así lo he dicho cuando los jueces me lo han preguntado. La primera vez que lo vi fue cuando me lo presentaron en la Zona de la Guardia Civil, porque era el técnico encargado en Andalucía, según me dijeron, para hacer el informe de las parcelas que cada empresario ofertara. Una vez terminado este tramite, no he vuelto a tener relación con el señor Salmerón. Es decir, una vez que le acompañé a ver mis parcelas, como lo acompañaron también a ver sus terrenos otros empresarios interesados en hacer el nuevo Cuartel, no he vuelto a tener mas relación con él, hasta que lo vi en el juzgado.
-¿Cómo cree usted que se inició este proceso judicial? ¿Piensa que a alguien le interesó que esto llegase a los tribunales? -Siempre hay intereses, que no le quepa la menor duda. En diciembre de 2006, cuando empezaron a pedir información para ver qué se podía rascar, yo estaba en conversaciones con la entidad Mercadona, y esto sabe usted que puede despertar el interés de los empresarios. Alguno que otro quería adelantarse a la operación y le molestó que no la pudieran hacer. También creo que hay otros intereses, pero ahora, por respeto al proceso judicial, no le voy ampliar esta información -¿Qué espera de la justicia? -Es muy reiterativo, pero es lo cierto: lo único que espero de la justicia es que sea justa; tengo muchas ganas de que se aclare todo. Mi letrado ha recurrido el auto dictaminado por la juez, porque considera que no hay elementos de prueba suficientes contra mí en función de los delitos que se me imputan.
-¿En qué medida le está afectando todo este asunto? -Muchísimo. Piense que he arriesgado mi dinero, mi tiempo, mi esfuerzo y todo mi patrimonio, y ahora me encuentro despojado del mismo e imputado en un asunto en el que no me reconozco. No sé qué he hecho mal. De verdad, tengo claro que yo no he hecho nada incorrecto. Nada de nada. Así se lo transmití al juez y lo digo públicamente. Como se entenderá, vivir en un pueblo en el que todos nos conocemos y estar imputado por un supuesto delito de tráfico de influencias es muy duro. Yo no he dado ni un euro a nadie, para que me facilite información de ningún tipo.(Abc)
