VESPER
En el instante vespertino
Es el silencio una oración;
Un arroyuelo cristalino
Palpita al borde del camino
Como si fuera un corazón.
En la llanura, pensativo
Está el pastor, bajo la luz
Del sol poniente de oro vivo.
Abre sus ramas un olivo
Y es a lo lejos una cruz.
Pace el ganado por el prado
Y en paz bucólica el pastor
En la dulzaina entona un fado;
Vuelve sus ojos al ganado
Y lo contempla con amor.
Y ante la paz de los senderos
Que traza el sol en el ocaso,
Mientras elevan plañideros,
Leves balidos los corderos
Que hacia el redil tornan el paso,
Piensa que el mundo es un camino
La humanidad vieja y cansada,
Como un rebaño peregrino,
Y que un Pastor bueno y divino
Lo va llevando a la majada.
A un ideal redil soñado,
Todo ventura, paz y amor;
Y que la brisa por el prado
Es la canción, el triste fado
De la dulzaina del Pastor.
Agustín Aguilar y Tejera
En el instante vespertino
Es el silencio una oración;
Un arroyuelo cristalino
Palpita al borde del camino
Como si fuera un corazón.
En la llanura, pensativo
Está el pastor, bajo la luz
Del sol poniente de oro vivo.
Abre sus ramas un olivo
Y es a lo lejos una cruz.
Pace el ganado por el prado
Y en paz bucólica el pastor
En la dulzaina entona un fado;
Vuelve sus ojos al ganado
Y lo contempla con amor.
Y ante la paz de los senderos
Que traza el sol en el ocaso,
Mientras elevan plañideros,
Leves balidos los corderos
Que hacia el redil tornan el paso,
Piensa que el mundo es un camino
La humanidad vieja y cansada,
Como un rebaño peregrino,
Y que un Pastor bueno y divino
Lo va llevando a la majada.
A un ideal redil soñado,
Todo ventura, paz y amor;
Y que la brisa por el prado
Es la canción, el triste fado
De la dulzaina del Pastor.
Agustín Aguilar y Tejera
Agustín Aguilar y Tejera nacido en 1.890, es el autor del libro Saetas editado en 1.916 cuya portada se reproduce en la imagen adjunta. Fue su padre D. Antonio Aguilar y Cano, gran historiador destacando sobre todo las dos obras dedicadas a su pueblo natal: “Apuntes históricos de la Villa de Puente Genil”, en colaboración con Agustín Pérez de Siles y “El Libro de Puente Genil” editado en 1894.
Los versos que aquí se reproducen aparecieron en el número UNO de la revista La Ilustración Pontanense de fecha 1 de febrero de 1.925.
Los versos que aquí se reproducen aparecieron en el número UNO de la revista La Ilustración Pontanense de fecha 1 de febrero de 1.925.