Nacho Moya logró superar la barrera de los 500 goles en la Asobal con el Ángel Ximénez en el partido que dio la permanencia matemática al equipo de Puente Genil, con el que confía en renovar después de sumar ya tres temporadas. "Ni sabía lo de los 500 goles hasta que salió, pero sobre todo estoy contento de lograr por fin la salvación y a la vez ya era hora que me saliera algo bien a nivel personal", ha apuntado un Nacho Moya que con sus siete goles colaboró en el empate de los pontanenses en la pista del Go Fit Sinfín (31-31).
"Ahora hay que pensar en el futuro y si Dios quiere espero renovar. Aquí estoy muy contento y a gusto, tengo el cariño de mis compañeros y la directiva, y no me planteo la salida", ha dicho Moya, que de esta forma confía en seguir aumentando su nómina de goles en la Asobal con el conjunto de Puente Genil para que sea con el club que más marcó después de pasar una temporada por el Fertiberia Puerto Sagunto y tres en Antequera.
Moya ha añadido que ahora queda "acabar ganando" ante el GlobalCaja Ciudad Encantada de Cuenca, que debe ser un partido "para disfrutar algo del año que más se sufrió", porque se jugará "ya sin presión ninguna y hay que brindarle el triunfo a la afición".
El futuro distinto de los cuatro malagueños
Así espera dar un hasta luego a los pontanos, porque si nada raro Nacho Moya renovará, aunque del clan de los cuatro malagueños que acaban contrato el primero en hacerlo será Curro Muñoz. Miguel Ángel Olea y Guile de la Sierra lo tienen más difícil, sobre todo el lateral, que motivos laborales dejará el balonmano profesional.(Córdobadeporte.David Jurado)
