El Ángel Ximénez estaba cuajando la que hasta el momento era su mejor temporada en la Asobal. A pesar de no ganar fuera de casa, el conjunto de Puente Genil gozaba de una fortaleza en su pista que le permitía mejorar los guarismos de sus dos primeras temporadas en la élite a estas alturas de la competición. Las bajas habían mermado al equipo pero la fuerza del grupo parecía sobreponerse a ellas de manera aceptable. Todo marchaba viento en popa hasta que en apenas unos días el Bada Huesca asaltó el Alcalde Miguel Salas y el técnico Fernando Barbeito anunció su marcha tras recibir una gran oferta -tanto económica como deportiva- para ser seleccionador de Bahrein.
Las dudas se ciernen ahora sobre el proyecto del Ximénez, cuya directiva ha encomendado a Javier Cabanas la tarea de firmar la permanencia del equipo por tercer curso consecutivo en la máxima categoría. Y es que con su mejor jugador (Chispi) lesionado, con una plantilla corta de efectivos y con el revés de la marcha de Barbeito, todo lo que sea no pasar apuros de aquí a final de temporada ya será bien recibido en el seno de la entidad pontana. Cabanas, que no se sentaba en un banquillo desde 2008, tendrá ante el Guadalajara (Municipal David Santamaría, 20:30) un acelerado debut tras apenas haber dirigido dos entrenamientos a sus nuevos jugadores.
Para colmo, la mala racha del Ximénez lejos de Puente Genil, donde todavía no ha ganado en lo que va de competición, invita poco al optimismo. Enfrente estará un equipo que tan sólo tiene un punto menos que los pontanos, por lo que una derrota en territorio alcarreño metería de lleno al Ángel Ximénez en la zona baja de la tabla. Sería un comienza cargado de dudas y presión para Javier Cabanas, que ya sabe que salvo circunstancia extraordinaria su estancia en el club no se alargará más allá del próximo verano, momento en el que la directiva del Ximénez replanteará el proyecto deportivo del club.
Para el estreno ante el Guadalajara del cordobés César Montes, Cabanas no podrá contar con el pivote hispano-argentino Sebastián Kramarz, que sigue lesionado en un tobillo, mientras que Nacho Moya arrastra molestias y es duda. Tampoco estará en la pista Chispi, que sigue con el proceso de recuperación de su rodilla, si bien el sevillano decidió viajar con el equipo para arropar al nuevo técnico desde el primer momento. El objetivo en Guadalajara es dar un golpe en la mesa con el primer triunfo lejos de casa para evitar que las interrogantes se apoderen del futuro inmediato del Ángel Ximénez. Un nuevo revés metería en serios problemas a un equipo que le quedaría dos duelos más antes de finalizar este año. (El Día de Córdoba. Rafael Cano)
