El sector de la iluminación artística, motor fundamental económico en Puente Genil, festeja estos días el 125 aniversario de la llegada de la luz eléctrica al municipio, un acontecimiento que ha abierto una vía de reflexión sobre su presente y su futuro. Y, de entre todos los retos que ha de afrontar, es la necesidad de crear una cantera de trabajadores cualificados uno de los principales. Fueron los propios empresarios quienes realizaron esta demanda al Ayuntamiento durante la mesa redonda organizada por El Día con motivo de la celebración que vive el municipio. En el encuentro participaron el alcalde pontanés, Esteban Morales (PSOE); el presidente de la Asociación de Empresarios (Asojem), Salvador Sánchez; el presidente de Iluminaciones Ximénez, Francisco Jiménez, y el director comercial de Porgesa, Juan Manuel González. El debate fue moderado por el director de este periódico, Luis Javier Pérez-Bustamante.
El primer edil asumió la petición de los empresarios y señaló que trasladará a la Consejería de Educación esta demanda a fin de que estudie la implantación de una escuela taller o un ciclo formativo de grado medio en la localidad que forme a los jóvenes en un sector que, actualmente, da trabajo a más de 500 personas en la localidad. Y es que tanto Jiménez como González coincidieron en la necesidad de aumentar la plantilla de sus empresas cuando se aproximan las fiestas navideñas, pues el trabajo en la iluminación artística se realiza "en todo el mundo a la vez, lo que provoca un alto problema de personal cualificado", según puso sobre la mesa el director comercial de Porgesa. Las condiciones laborales que impone el montaje del alumbrado de Navidad también dificulta la entrada de nuevos trabajadores, ya que implica, en muchos casos, "que el personal tenga que estar fuera del hogar en torno a unos 20 días", concretó Jiménez.
Fue Puente Genil la primera localidad de la provincia de Córdoba en adquirir electricidad, allá por la última década del siglo XIX. Llegó gracias a la fuerza motriz del río Genil, con la instalación de una veintena de lámparas. Desde ese momento, la electricidad ha supuesto un revulsivo para la economía local, ya que de entre las casi 80 empresas que actualmente conforman el sector de la iluminación artística a lo largo de toda la geografía nacional dos de las más importantes tienen su sede en esta ciudad de Córdoba. Se trata de Porgesa e Iluminaciones Ximénez, encargadas de iluminar las ferias y fiestas de las grandes ciudades españolas y que con la crisis, además, han enfocado sus objetivos hacia el mercado exterior.
Como reconoció el propio presidente de Asojem, Salvador Sánchez, "la crisis ha afectado a los distintos sectores de Puente Genil y, de ella, tampoco han podido librarse las grandes empresas de iluminación". El presidente de Ximénez corroboró esta idea: "Hemos tenido que frenar importantes proyectos de expansión que teníamos planteados antes del inicio de la crisis, proyectos que de seguro habrían creado nuevos puestos de trabajos para la ciudad".
La crisis ha supuesto para estas empresas unas pérdidas cuantificadas en un 25%, reconocieron durante la mesa tanto Jiménez como González, quienes explicaron que se han tenido que abaratar los precios en los pliegos de licitación en los que han participado, a pesar de que se mantiene la apuesta por la calidad y la innovación. Al tiempo, han aumentado los costes, como el que tuvieron que realizar para cambiar la bombilla incandescente por la de led, mucho más ecológica, que por el momento ha tenido que sufragar la propia empresa.
Y lo cierto es que la relevancia de estas empresas en el sector no ha decaído pese a los problemas. Según indicaron los expertos en el transcurso de la mesa redonda, la creación de nuevas empresas sin apenas experiencia, así como el intrusismo o las malas praxis de algunas de ellas, han provocado que la lucha diaria sea aún más complicada. "Es difícil competir con empresas cuyos materiales no son de la mejor calidad y que, por lo tanto, pueden ofrecer precios inferiores a los nuestros", lamentó Juan Manuel González, al tiempo que indicó que "no existe mejor promoción que la que nos hacemos nosotros mismos con la realización de trabajos bien terminados y en los que la profesionalidad, la originalidad en los diseños y la dedicación sean la clave".
El sector, en el que la profesionalidad se traspasa de generación en generación, ha sabido encontrar su oportunidad en momentos en que los ayuntamientos y los ciudadanos "parecen haber dejado de entender la iluminación en las calles y edificios como un reclamo turístico y se ve como un gasto más", como apuntó Francisco Jiménez. De esta manera, trabajan por hacerse un hueco en mercados internacionales, así como en la decoración lumínica de centros comerciales.
Así ha ocurrido ya con Porgesa en Portugal, mientras que Oslo (Noruega) o Munich (Alemania) son algunas de las ciudades europeas con las que Iluminaciones Ximénez mantiene contactos con el fin de vender las luces que iluminen sus calles durante las próximas fechas navideñas.
Otra de las reflexiones lanzadas a lo largo de las casi dos horas que duró esta mesa redonda fue el desamparo a nivel de subvenciones por parte de las distintas administraciones. Un ejemplo de ello -señalaron los máximos responsables de Porgesa y Ximénez- estuvo en el momento en el que las empresas realizaron aquel cambio de bombillas incandescentes por las modernas led de luz fría. Y es que, a pesar de que la Junta de Andalucía ofreció una subvención para este cambio, al tratarse de una iluminación itinerante y no fija no pudieron optar a la misma. Las diferentes administraciones conceden posibles ayudas para la contratación de personal o para la ampliación de instalaciones, circunstancias paralizadas con la llegada de la crisis económica.
Pese a estas circunstancias, ambas empresas reconocieron mantener una excelente sintonía con el Ayuntamiento de Puente Genil, con convenios para la decoración del municipio en distintas fechas señaladas en el calendario. Morales subrayó que las calles pontanesas se convierten así en "el mejor de los escaparates, ya que lucen sus mejores catálogos". De hecho, este reclamo hace que alcaldes y concejales de otras localidades acudan caño al municipio para ver los diferentes alumbrados.
Fue tal la relevancia que adquirió en la localidad la llegada aquel 11 de agosto de 1889 de la luz eléctrica que ello dio pie a la creación de unas empresas que a día de hoy impulsan la actividad comercial y económica pontanesa. Como destacó el presidente de Asojem, Salvador Sánchez, "se celebrarán a lo largo de los próximos meses una serie de actividades conmemorativas en las que no sólo contamos con el apoyo del Ayuntamiento, sino con las empresas de iluminación decorativa de Puente Genil". Las actividades invitarán al visitante a conocer un sector que hace que, como reza el eslogan creado para la ocasión, Puente Genil esté "brillando con luz propia". (El Día de Córdoba. Gema Moreno)