La consejera de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Elena Cortés, consideró ayer que "la persistencia y dureza de la crisis económica" exige como respuesta "una quita hipotecaria que alivie la situación desesperada" de las familias. Cortés recordó que "la morosidad de las hipotecas está en niveles récord", y que incluso las familias que "a partir de 2007, en el inicio de la fase más dura de la crisis, lograron renegociar sus condiciones y conseguir algo de margen, ahora se vuelven a ver con el agua al cuello". "El problema va a más", alertó la consejera, quien asistió al primer aniversario de la plataforma Stop Desahucios en Puente Genil.
Cortés detalló que en las propias oficinas provinciales del Programa Andaluz en Defensa de la Vivienda la Consejería está constatando un "agravamiento" de la morosidad hipotecaria, que se traduce en "la insostenibilidad de las economías familiares". La consejera consideró también que "el empeño del Gobierno central por taponar cualquier iniciativa que alivie esta situación empeora el panorama", poniendo como ejemplo su "obstinación en rechazar la regulación de la dación en pago y el alquiler social". Ante la Ley de Medidas para Asegurar la Función Social de la Vivienda, aprobada para favorecer el alquiler y evitar desahucios de familias en riesgo de exclusión social, la respuesta del Gobierno ha sido un recurso "basado en argumentos falaces", subrayó.
Para Cortes, "lo que pone en peligro el sistema financiero no es la Ley de Función de la Vivienda; al contrario, ésta incide en la promoción del alquiler, que es el mecanismo óptimo para reducir riesgos en el sector". "Lo que ha destrozado al sistema financiero ha sido la especulación inmobiliaria y la acumulación de riesgo crediticio, precisamente la vía en la que insiste el Gobierno", señaló. La consejera apuntó también que ante la "estafa financiera e hipotecaria, las clases populares han tenido su mejor aliada en la sociedad civil organizada, en colectivos como la Stop Desahucios y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, que llevan cinco años parando desahucios y evitando dramas personales". Así las cosas, Cortés animó a la sociedad civil organizada a continuar "luchando contra los desahucios y situando el problema de la vivienda en el centro del conflicto social". "
Cortés también se refirió a la autovía del Olivar y recordó que "se comprometió a acabar aquellas obras que tuvieran un alto grado de ejecución. Sin embargo, aseguró que "no es el caso del tramo de autovía de Lucena-Estepa".(El Día de Córdoba. José Manuel Cabezas)