Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Refugiado la asamblea local de la Cruz Roja de Puente Genil organizaba la tarde del pasado 20 de junio una serie de actividades de convivencia que tenían como fin recordar a las personas desplazadas en el mundo por la violencia, la guerra y la persecución.Entre los actos lúdicos programados destacaba la celebración de un partido de fútbol sala entre los que son atendidos en el Programa de Refugiados y personal voluntario disputado en la pista polideportiva que la asamblea local tiene en su sede, así como una partida simultánea de ajedrez, finalizando la jornada con una cena de convivencia en la que primaron platos típicos realizados por algunos residentes.
La concejala de Hacienda, Recursos Humanos, Patrimonio y Cooperación al Desarrollo, Verónica Morillo, invitada a compartir el día de convivencia por la presidenta de Cruz Roja, Lola Sebastianes, agradeció públicamente el trabajo que la asamblea local viene realizando día a día, subrayando “su labor de integración social, laboral y educativo”, y aludiendo a la sensibilización de la población “con aquellos que viven en países que no pueden disfrutar de los derechos y libertades”.
Por su parte, la presidenta de la asamblea local se refirió a la tarea que Cruz Roja realiza con el colectivo de solicitantes de protección internacional al proporcionarles las necesidades básicas mínimas de alojamiento y alimentación, además de asesoramiento psicológico y laboral “para, en definitiva, intentar la integración de estas personas en el sitio donde son acogidos”.
Lola Sebastianes apuntó que, en la actualidad, el centro acoge a 40 personas solicitantes de protección internacional llegadas principalmente de Costa de Marfil, cantidad inferior a la registrada el pasado año cuya cifra superó el centenar, añadiendo que “sabemos la situación de crisis en la que nos encontramos y cómo afecta a las ayudas que se les proporcionan a estas personas, que hoy día aún son más vulnerables”, matizando que “no nos escudemos en la crisis para olvidarnos de las consecuencias tan graves que llevan a una persona a ser refugiada”. ( Sur de Córdoba )
