
Tras practicar indagaciones en diversos locales de compra-venta de oro, la Guardia Civil logró verificar que T. M. O. H., voluntaria de la residencia, había vendido en algunos establecimientos varias joyas de características similares a las sustraídas. Más tarde se demostró que eran las mismas que habían sido robadas. Ante ello, la Guardia Civil centró sus sospechas sobre T. M. O. H., logrando averiguar que valiéndose de su condición de cuidadora se había granjeado la confianza de los responsables del centro, trabajadores y ancianos. De esta forma y sin levantar ningún tipo de sospechas había sustraído las joyas y efectos de valor a los ancianos, quienes como consecuencia de padecer enfermedades propias de la edad, son incapaces de denunciar lo sucedido a sus familiares o a otros cuidadores.
Los agentes han detenido a la supuesta autora de los robos y las joyas recuperadas ya han sido entregadas a sus propietarios. T. M. O. H., es persona bien conocida de la Guardia Civil por sus antecedentes delictivos, ya le constan otras dos detenciones anteriores por la supuesta comisión de ilícitos relacionados con el patrimonio. La detenida ha pasado a disposición judicial. ( El Día de Córdoba )