El presidente del Ángel Ximénez, Mariano Jiménez, ha valorado la permanencia lograda por su equipo en una temporada en la "sólo" se queda "con la afición", ya que ésta fue la "protagonista de que se lograra la salvación" en el año "más difícil" desde que el club juega en la Liga Asobal. "Otra temporada como ésta es difícil que se repita", en un año en el que "pasaron demasiadas cosas malas", pero afortunadamente "la afición llevó en volandas" a su equipo, ya que catorce de los diecisiete puntos logrados se ganaron en Puente Genil, y es que en una campaña "tan mala hay poco dónde elegir".
El mandatario ha recordado que cuando el técnico, Fernando Barbeito, decidió marcharse en diciembre "no veía el final a las desgracias. Aquello se lo reproché, pero eso ya es pasado. Nos ha servido de experiencia y hemos aprendido muchas cosas. Ahora harán falta cuatro o cinco jugadores de más calidad", ha adelantado de cara a iniciar la planificación de la próxima temporada en la que "no puede volver a pasar los mismo cuando lleguen las lesiones".
De ahí que el mandatario haya adelantado que "hay que darle otro el aire al equipo", para que tenga "más competitividad como visitante", porque "si se jugase fuera igual que en casa se podría estar entre los cinco o seis primeros como Cangas o Aranda hicieron este años".
El conclave de Guadalajara y la conversación pendiente con Cabanas
Al final el Ángel Ximénez se vio abocado a un final agónico con el Teucro tras la retirada del BM Aragón, tramo definitivo en el que Jiménez ha subrayado que los técnicos Javier Cabanas y Jesús Ollero "hicieron un buen trabajo en la segunda vuelta porque no conocían a la plantilla", con independencia de que el equipo jugase "mal" lejos de Puente Genil. La victoria hace dos jornadas ante el Guadalajara supuso una liberación, un triunfo que llegó tras una puesta en común del presidente con toda la plantilla a la que citó en sus dependencias profesionales. "Cuando las cosas no salen la responsabilidad lleva a echarle la culpa a todos y entonces hubo demasiado estrés y auto-presión", ha apostillado Jiménez. A raiz de aquella puesta en común el equipo "se unió y saco fuerzas" para lograr el objetivo.
Con la permanencia asegurada y pese a restar una jornada, Mariano Jiménez ya sólo piensa en la próxima temporada y es consciente que el club va tarde en su planificación. Por ello lo primero será concretar qué persona dirigirá al equio la próxima temporada, para lo que tiene "una conversación pendiente con Cabanas", al que ha emplazado para que este lunes le presente su proyecto de cara a la próxima temporada para poder "valorar si interesa o no al club", dado que ahora lo primero es "decidir quién será el entrenador". Esas fueron las honestas palabras de Mariano Jiménez, que prefiere huir de todos los rumores que circulan por los foros balonmanísticas que apuestan por la llegada de un nuevo entrenador y la no renovación de Cabanas. Un secreto a voces que expirará a más tardar el próximo martes.(Córdobadeporte. David Jurado)