Este sábado a partir de las 17.30 horas el Ángel Ximénez visita al Barakaldo con el objetivo de lograr su primera victoria del campeonato tras no poder conseguirla en un difícil encuentro ante Alcobendas en el estreno liguero, saldado con 25-25. Ahora el equipo pontano visita al Barakaldo, otro equipo que busca sumar un triunfo y al que no pudo ganar la pasada campaña.
En la temporada anterior el conjunto pontano venció con holgura en casa 32-24 al equipo vasco, pero perdió a domicilio 24-22, por lo que tiene ahora la oportunidad de tratar de conquistar el Pabellón Municipal de Lasesarre en este ejercicio, donde cuenta con muchas opciones de estar en la zona alta.
El Ximénez es séptimo en la primera clasificación de la temporada, mientras que Barakaldo es octavo tras caer en el estreno en el feudo del Pozoblanco por 26-25. El Ximénez pudo haber ganado a un difícil Alcobendas, pero le faltó regularidad a lo largo del partido. El conjunto pontano arrastra desde la primera semana de la pretemporada varios lesionados y eso le ha imposibilitado acoplar un grupo al que además han llegado refuerzos, varios de ellos jóvenes.
Afortunadamente para sus intereses, la enfermería se ha ido desalojando y el único que queda ahora mismo es Guille de la Sierra, que se todavía perderá varios partidos más antes de reaparecer. Está realizando sesiones de rehabilitación y poco a poco va mejorando. El otro jugador que no estará disponible para este partido es Mario Porras, que no obstante tiene cada más cerca su reaparición. Está entrenando a un ritmo cada vez más alto y en una o dos semanas puede que esté disponible.
El técnico Javier Elvira aseguró que tras el partido inaugural de la temporada "tenemos la sensación agridulce por haber empatado ante Alcobendas y esperamos ir mejorando en las jornadas siguientes", pero también indicó que "hay que tener en cuenta que ellos son un buen equipo, tal y como lo demostraron y seguro que estarán arriba".
Consideró que a su equipo aún "nos falta regularidad, porque en el último partido jugamos a rachas. Seguimos haciendo un trabajo importante para acoplar a la gente, ya que por lesiones no hemos podido tener a todos nunca y esa es la línea a seguir", comentó.
Ahora toca jugar en Barakaldo en un encuentro que valoró como "complicado, como todos los de fuera de casa en esta liga. Nos vamos a medir a un equipo que ya nos ganó el año pasado, que ha perdido jugadores, pero que tiene a mucha gente de la casa. Es un equipo muy aguerrido y difícil de batir en su cancha".
Al respecto agregó que tiene jugadores referencia como Ortuondo, el central, y Joseba Rodríguez, "que llevan el peso del equipo", secundados por un grupo de jugadores de la casa que en opinión del técnico granadino "suponen un plus, porque son jugadores que va a muerte y no dan un balón por perdido. Nosotros tenemos que ponernos a su altura en agresividad e intensidad para competir o perderemos seguro", sentenció.
( Córdobadeporte. M.A. Medel)
