
Ambas partes ya mantuvieron una primera toma de contacto el pasado mes de febrero y, aunque por aquel entonces existía voluntad de alcanzar un acuerdo, el principal obstáculo estaba en el aspecto económico y, sobre todo, en el elevado coste que una inversión de estas características podría suponer para las arcas municipales. En este sentido, el propio regidor explico que "a lo largo de los últimos meses hemos trabajado en otras posibilidades, pero se han ido cerrando y esta es la única que nos queda, ya que la opción de esperar a que el Ayuntamiento pueda pedir un préstamo para inversiones no se vislumbra en el corto plazo".
El debate sobre la construcción del nuevo depósito de agua llega tras los constantes problemas que está generando el actual, cuyo deteriorado estado ha motivado la realización de diferentes obras de reparación a lo largo de los últimos meses, una circunstancia que ha dado lugar a una importante bajada de la presión del agua en distintas zonas del casco urbano del municipio, con las consiguientes molestias que ello ha supuesto para los vecinos de algunos barrios de la población. Al hilo de ello, Esteban Morales siempre se ha mostrado partidario de que el Ayuntamiento haga frente al problema con sus propios medios, "ya que aunque la Junta de Andalucía podría meter la obra en la cartera de la Agencia Andaluza del Agua, eso retrasaría con mucho los plazos y nosotros necesitamos una solución urgente".
En principio, todo apunta a que el nuevo depósito municipal de agua se construiría en el polígono industrial San Pancracio, aunque en una zona distinta a la actual y más segura, dado que una intervención para reformar las actuales instalaciones traería consigo un coste muy superior al inicialmente previsto. ( El día de Córdoba. José M. Cabezas )
