Varios representantes sindicales de la empresa Panrico se han reunido con el alcalde de Puente Genil, Manuel Baena (IU), para analizar el incierto panorama laboral que tienen ante sí los cerca de 200 trabajadores directos de la planta que esta empresa tiene en la localidad a raíz del reciente cambio de propietarios. En este sentido, el presidente del comité de empresa, Gregorio Gil, confió en que el empleo se mantenga en la fábrica en esta nueva etapa que se abre y señaló que hasta ahora los trabajadores están a la espera de acontecimientos.El dirigente sindical afirmó que el mes de septiembre será clave para el futuro de la planta, ya que será entonces cuando la banca acreedora se haga cargo de la empresa. "Lo que más nos preocupa es el mantenimiento de los empleos, sobre todo porque actualmente la empresa está teniendo una carga de trabajo cifrada en un 30 o un 35% por debajo de lo que suele ser habitual y lógicamente todos somos conscientes de que en el caso de que no aumenten las ventas habrá dificultades", reconoció en su comparencia junto alcalde de la ciudad. Gil también agradeció al regidor pontanés el interés que está mostrando por este tema y mostró su confianza en que los nuevos propietarios presenten un plan de viabilidad que permita reflotar la situación de una empresa que cuenta en Puente Genil con una fábrica que genera numerosos empleos.
Según informaron los representantes sindicales, para mañana sábado está prevista una asamblea de trabajadores en la que se analizará la situación laboral de la empresa, si bien poco se sabe del futuro de la entidad hasta que los nuevos propietarios tomen las riendas de la firma. De otro lado, los empleados de Panrico esperan también el apoyo de la Junta de Andalucía, ya que la Administración regional ya adjudicó una ayuda para la puesta en marcha de una nueva línea de fabricación. Según los datos de los sindicatos, la plantilla de Panrico está formada por unas 180 personas con contrato indefinido, a los que se unen otras 25 temporales. Además, la nómina de empleos indirectos -como los repartidores- supera el medio millar.(El Día de Córdoba)
