
Según ha podido saber ABC, se han recogido unas 4.000 toneladas de membrillo, algo menos que en otras campañas, pero la disminución en porcentaje ha sido muy leve, de en torno al 5 por ciento. En cuanto al fruto obtenido, es de «mayor tamaño y con un gran calidad», señaló un agricultor, debido «a las intensas lluvias del pasado invierno». Estas cantidades están muy lejos los 5 ó 6 millones de kilos de membrillo que se recogieron en las décadas pujantes del fruto.
El problema de los productores del membrillo, es decir, de los fabricantes de carne de membrillo y otras variedades, es que este año se tendrán que enfrentar a una subida muy importante del precio del azúcar y el jarabe de glucosa calculada en un 20 por ciento.
Esto les obligará a aplicar una subida del 18 por ciento del precio total de estos productos elaborados del membrillo, lo que en plena época de crisis deja a los productores en una situación complicada para defender sus productos. A esta circunstancia hay que sumar el incremento en el precio del cartón y del plástico. En Puente Genil operan tres fábricas de membrillo que producen carne al estilo tradicional, así como crema o membrillo «light» para diabéticos y confituras de membrillo.
Los principales consumidores nacionales de los productos de Puente Genil se encuentran en el norte de España, más concretamente en el Cantábrico, y los últimos mercados conquistados llevan la producción hasta Australia.
El membrillo es un cultivo que nunca ha sido objeto de subvención. Tan sólo hace unos cuatro años consiguieron por parte del Ministerio de Agricultura un seguro agrario que les puede aliviar económicamente ante posibles heladas o granizadas.
Este fruto se caracteriza por no necesitar del frío para su mantenimiento en perfectas condiciones, por tener un alto nivel energético y por su sabor dulce. Esto lo transforma en un elemento ideal para consumirlo en zonas de conflicto, concretamente allí donde suele actuar la ONU a lo largo y ancho del mundo. Así, se consume membrillo pontanés en cerca de 40 países de todo el mundo, con especial penetración en Chile y Argentina.(Abc. Virginia Requena)